lunes, 27 de agosto de 2007

El haiku en las escuelas

Si se les pregunta a los jóvenes y niños japoneses sobre el haiku, generalmente las respuestas lo considerarán muy difícil, anticuado y un pasatiempo del abuelo de Chibimaruko-chan (un personaje de dibujos animados). Precisamente esta situación quiere revertir la Asociación del Haiku Moderno (Gendai Haiku Kyokai). Según un artículo de Masanori Sasaki, publicado en el Asahi Shimbun, los miembros de esta asociación durante tres años han estado visitando las escuelas primarias y secundarias para instruir a los niños y jóvenes en “el aspecto divertido del haiku y los placeres de componerlo”.
Las visitas han abarcado principalmente la región de Kanto, pero también Nagano, prefecturas de Hyogo y una escuela en la isla de Niijima en las islas de Izu. En mayo y junio de este año se visitaron 11 escuelas, lo que demuestra que los esfuerzos se están apreciando. Las escuelas piden a los instructores “cultivar la sensibilidad estética y ahondar la comprensión del tanka y poemas del haiku en los textos japoneses”. Según Kenichi Tatsuke, jefe de la sección de entrenamiento de la Asociación, “la mayoría de las clases de instrucción a los niños consagran más tiempo en apreciar el haiku existente en lugar de componer nuevos poemas. Pero si se dan los niños algunos ejemplos e indirectas, ellos reaccionarán inmediatamente y escribirán su propio haiku”.
Un ejemplo fue la visita que realizaron los poetas instructores a los alumnos de sexto básico de la Escuela Elemental municipalYokohama Nishihongo. En tres periodos de clases con un total de de dos horas y media, empezaron explicando las reglas del haiku. Para romper el hielo Tatsuke, tocando el piano, les mencionó el béisbol, el fútbol, y otros temas familiares a los niños. Después les entregaron hojas de “haiku” incompletos. La tarea de los niños era rellenar el espacio en blanco en un poema como “Las ranas del árbol / su lección por la noche / es___” o “El sol / comió mi /___."
A través de este juego de palabras, los estudiantes escogieron también las palabras de la estación del año para ser usadas después. Los niños compusieron haikus con las palabras estacionales que ellos habían escogido, intentando escribir los poemas en la forma tradicional. Los poemas acabados eran escrito en tiras de papel y expuestos en la pizarra. La tarea final fue que de manera colectiva, en equipo de tres estudiantes, compusieran un poema. Según reconocieron los mismos estudiantes las dos horas y media “se les pasaron volando”. Aquí copio algunos de los resultados:

Dekkaina
shiroi kaiju
nyudogumo
(Cómo grande / el monstruo blanco es / un nubarrón muy alto)

Kakigori
atama no naka ni
pengin arawaru
(El granizado / en mi cabeza / un pingüino hace estallar)

Masshiroi
futon o haida
kakigori
(En puro blanco / la tapa del futon se quita / para mostrar el granizado)

Suika no me
takusan atte
taihenda
(Los ojos de sandía / hay tantos de ellos / que es una molestia)

Kenichi Tatsuke ha dicho que después de estar tres años actuando recíprocamente con los niños, estas actividades han ayudado a desarrollar entre ellos un sentido de ternura para con los otros o sentimientos nobles hacia la naturaleza.

Fuente: asahi.com: Weekend Beat/ CULTURE & MORE: Visiting poets use tools ...

1 comentario:

Aurelio Asiain dijo...

Ah, qué interesante. Sin saberlo, dejé de tarea a mis alumnos que, al volver de las vacaciones de verano, trajeran un haiku. Para mi sorpresa, muchos no supieron hacerlo ajustándose a la forma tradicional; pero, también para mí sorpresa, casi todos mostraron saber lo que es la poesía, aun si sus versos no están logrados.