Jingoji es un templo venerado por la secta Shingon fundado en el año 781. Desde el 809 Kukai (Kobo Daishi; el fundador de la secta Shingon) fue durante 14 años el sacerdote principal. Además de la estatua de Yakushi Nyorai (un Tesoro Nacional) el templo retiene muchas pinturas de las imágenes budistas y escrituras de los periodos Heian y Kamakura.
También se encuentra El Bonsho (un Tesoro Nacional). Es una de tres campanas más famosas en Japón. Hecha de bronce, su altura es 1,47 metros y su diámetro de 80,3 centímetros. Las palabras de la inscripción en la campana han sido escritas por Tachibana no Hirosuke, el título por Sugawara no Koreyoshi y escritas a mano por Fujiwara noToshiyuki. El Templo de Jingoji es muy popular durante el otoño debido a sus hojas de color rojo.
El Yakushi Nyorai de Jingoji es una estatua en pie esculpida de madera negra. El cuerpo es corto, fuerte y musculoso, la cara tiene una gran expresividad. La estatua también posee un cierto grotesco, por ejemplo, en la redondez exagerada y la barbilla espesa que dan una impresión muy moderna. Es una escultura poderosa, conveniente para un templo que fue construido para permitirse el lujo de protección divina a una ciudad entera. 
 
 
 Todas las traducciones al inglés son de David G. Lanoue y se basaron en el zenshû de Issa (Nagano: Shinano Mainichi Shimbunsha, 1976-79) 9 volúmenes.
Todas las traducciones al inglés son de David G. Lanoue y se basaron en el zenshû de Issa (Nagano: Shinano Mainichi Shimbunsha, 1976-79) 9 volúmenes.


 El ministerio de educación había mantenido la posición de reconocer el hecho de que el ejército ordenó los suicidios en masa. Más de 200.000 civiles se quitaron la vida, incluyendo familias enteras, tras la batalla de Okinawa en 1945 y la invasión de soldados estadounidenses.
El ministerio de educación había mantenido la posición de reconocer el hecho de que el ejército ordenó los suicidios en masa. Más de 200.000 civiles se quitaron la vida, incluyendo familias enteras, tras la batalla de Okinawa en 1945 y la invasión de soldados estadounidenses. Oe dijo en una audiencia judicial en una corte del distrito de Osaka que: “Yo no veo una necesidad de hacer una corrección del hecho de que los suicidios en masa se forzaron por una orden (del ejército)”. Oe insistió que él no revisaría su libro Notas de Okinawa en que afirma que el Ejército Imperial japonés coercionó a los paisanos para cometer el suicidio en masa en los días finales de la Batalla de Okinawa en 1945.
Oe dijo en una audiencia judicial en una corte del distrito de Osaka que: “Yo no veo una necesidad de hacer una corrección del hecho de que los suicidios en masa se forzaron por una orden (del ejército)”. Oe insistió que él no revisaría su libro Notas de Okinawa en que afirma que el Ejército Imperial japonés coercionó a los paisanos para cometer el suicidio en masa en los días finales de la Batalla de Okinawa en 1945. La silueta de la estación de Kioto, una de las obras de Hiroshi Hara (Kawasaki, 1936), sobresale por sus medidas descomunales: ocupa 235.257 metros cuadrados y mide 470 metros de largo, 80 metros de ancho y 60 de alto.
La silueta de la estación de Kioto, una de las obras de Hiroshi Hara (Kawasaki, 1936), sobresale por sus medidas descomunales: ocupa 235.257 metros cuadrados y mide 470 metros de largo, 80 metros de ancho y 60 de alto.
 Gana importantes premios en los festivales de Cannes y Venecia con Harakiri (1962), que ataca el código moral de los samurais del siglo XVI; Kwaidan (El más allá) (1964), personal adaptación de varias de las historias de fantasmas japonesas recogidas por Lafcadio Hearn en un célebre volumen; y Rebelión (1967), donde de nuevo se enfrenta con la ética de los samurais. Tras Pavana para un hombre acosado (1968), adaptación de la novela del escritor católico Shusaku Endo sobre el conflicto generacional planteado durante la Guerra del Vietnam, la crisis de los grandes estudios japoneses le hace rodar películas mucho menos interesantes durante la década de los setenta, a pesar de haber participado en la creación de la productora Yonki no Kai (Los Cuatro Mosqueteros) con los directores Keisuke Kinoshita, Akira Kurosawa y Kon Ichikawa. Tienen más interés sus trabajos de los años ochenta, tanto el documental Los procesos de Tokio (1984) como la historia de ficción La mesa vacía (1985).
Gana importantes premios en los festivales de Cannes y Venecia con Harakiri (1962), que ataca el código moral de los samurais del siglo XVI; Kwaidan (El más allá) (1964), personal adaptación de varias de las historias de fantasmas japonesas recogidas por Lafcadio Hearn en un célebre volumen; y Rebelión (1967), donde de nuevo se enfrenta con la ética de los samurais. Tras Pavana para un hombre acosado (1968), adaptación de la novela del escritor católico Shusaku Endo sobre el conflicto generacional planteado durante la Guerra del Vietnam, la crisis de los grandes estudios japoneses le hace rodar películas mucho menos interesantes durante la década de los setenta, a pesar de haber participado en la creación de la productora Yonki no Kai (Los Cuatro Mosqueteros) con los directores Keisuke Kinoshita, Akira Kurosawa y Kon Ichikawa. Tienen más interés sus trabajos de los años ochenta, tanto el documental Los procesos de Tokio (1984) como la historia de ficción La mesa vacía (1985). Filmografía
Filmografía
 Hoichi, el músico sin orejas, es el tercer episodio sobrenatural y el más espantoso. La historia se centra en Hoichi, un hombre ciego famoso por su habilidad de recitar acompañándose del Biwa. Con su música y canciones representaba la batalla entre los clanes de Heike y de Genji, cuyos restos mortales están enterrados muy cerca del monasterio. De hecho al tocar así los fantasmas regresan y le exigen a Hoichi que durante seis noches actué para ellos representando la batalla de Dan no Ura.
Hoichi, el músico sin orejas, es el tercer episodio sobrenatural y el más espantoso. La historia se centra en Hoichi, un hombre ciego famoso por su habilidad de recitar acompañándose del Biwa. Con su música y canciones representaba la batalla entre los clanes de Heike y de Genji, cuyos restos mortales están enterrados muy cerca del monasterio. De hecho al tocar así los fantasmas regresan y le exigen a Hoichi que durante seis noches actué para ellos representando la batalla de Dan no Ura.

 Como curiosidad podemos mencionar que su imagen es usada para el octavo mes en el juego de cartas hanafuda (花札, “juego de las flores”) un tradicional juego de mesa de naipes japonés que consiste en formar y juntar parejas y que se inventó a mediados del siglo XVI. En Japón, es una de las dos barajas más populares junto al uta-garuta (“el juego de los cien poetas”).
Como curiosidad podemos mencionar que su imagen es usada para el octavo mes en el juego de cartas hanafuda (花札, “juego de las flores”) un tradicional juego de mesa de naipes japonés que consiste en formar y juntar parejas y que se inventó a mediados del siglo XVI. En Japón, es una de las dos barajas más populares junto al uta-garuta (“el juego de los cien poetas”).
